martes, 16 de diciembre de 2008

MORELIA: 8º ANIVERSARIO MONARCA


Hace ocho años, de la mano de Comizzo, Franco, Pavón, Almirón, Tato Noriega, Flavio Davino, Alex, entre otros, Morelia consiguió hacer honor a su sobrenombre de Monarcas, al levantar el único campeonato de nuestra historia, al vencer en tanda de penales al actual campeón Toluca, en el mismo infierno de la Bombonera, con una gran muestra de hambre de triunfo y de agallas para salir adelante de una situación adversa.

Todo comenzó una tarde en el verano del 2000, cuando Luis Fernando Tena tomó por vez primera, las riendas del Equipo de la Fuerza, y sólo dando de alta a Carlos Pavón Plummer, José Antonio 'Tato' Noriega, Gerardo Mascareño y Salvador Mariscal, quienes llegaron a sumarse a la base que había heredado el Flaco Tena de Tómas Boy.

El torneo inicio de forma un tanto desalentadora, ya que una derrota ante las Aguilas de América, en el estadio Azteca, parecían mostrar lo que podría ser un torneo cualquiera; pero poco a poco y paso a paso, el conjunto purépecha fue ganando terreno en la tabla general, jugandole de tú a tú a cualquier rival y en cualquier escenario, dejando el alma todos y cada uno de los jugadores emnpleados en cada cotejo, y sobre todo, creyendo ellos mismos en el milagro de poder campeonar, y así darle esa satisfacción a su afición y a ellos mismos.

Morelia termino el torneo en el quinto lugar de la tabla general, pero por el grupo en el que estaba, se tuvo que ir a la ronda de repechaje, enfrentandose a la cenicienta de aquel torneo: los freseros del Irapuato.

En el primer juego, Irapuato logró una sonora victoria de 1-0 sobre los michoacanos, pero nadie se imaginaría que para en encuentro de vuelta, con una inspiración digna del futuro campeón, Comizzo, Franco y Pavón, se encargaron de acribillar por 7-2 al conjunto guanajuatense, entrando embalados a los Cuartos de Final, donde se jugarían la vida ante los Tuzos de Pachuca.

En el primer juego, un 0-0 presagiaba una eliminación inminente para los rojiamarillos, al menos en teoría, ya que en el juego de vuelta, los dirigidos por Tena, ganaron 2-1, con goles de Carlos Pavón y Heriberto Ramón Morales. Hay que mencionar que el goleadro de aquel torneo, Carlos Pavón, se lesionó la rodilla, debido a la intesidad con la que peleo todos los balones, quedando fuera el resto de la competencia.
Ahora, Morelia se enfrentaría al subcampeón de un torneo antes: Santos Laguna.

Los laguneros con suerte de más, lograron sacar un empate sin goles del estadio Corona, sin embargo, ya en el 2º partido, Javier Lozano, Jorge Francisco Almirón y Carlos Adrian Morales fueron los actores principales de una sonora victoria de 3-2 para asi, darle a los otrora Canarios, la oportunidad de jugar por primera vez una final.

Pero entre Monarcas y el Campeonato, se encontraba el que sin duda ha sido el mejor equipo de los torneos cortos: los Diablos Rojos de Toluca.

En el primer episodio, Monarcas Morelia hizo lo que quizo con el equipo rojo, jugando ordenadamente, no perdiendo la cabeza y mostrando un hambre de triunfo impresionante.

Omar Trujillo (actual capitán Monarca) y Mario Ruíz, en aquel tiempo jovenes promesas michoacanas, marcaron su primer gol cada uno, y Alex Fernandes cerró la cuenta de tres goles para los locales.
Por su parte, el goleador estrella e ícono Diablo, José Saturnino Cardozo, descontó para los rojos, para dejar un marcador parcial de 3-1.

En el encuentro de vuelta, los diablos salieron con todo, buscando los goles necesarios para revertir el mal sabor de boca que traían de tierras michoacanas, y desde el minuto 1, el arquero Ángel David Comizzo ya se veía en acción.
Fue tanta la presión de lo locales, que para el minuto 25 de la primera mitad, Erick Espinoza y Cardozo ya habían empatado el marcador global, y por ende, se esperaba el primer campeonato invernal en la historia del Toluca, pero para la buena fortuna de los Ates, terminó el primer tiempo. Para los restantes 45 minutos, Toluca dejó de atacar con la misma frecuencia que antes, Morelia empezó a retomar fuerza, se ordeno y dejó de ver jugar a Toluca para empezar a pelear de nueva cuenta por el campeonato.

Toluca lucia más cansado, y la expusión de Edgar Ulises Rangel afecto de más a los dirigidos por Ricardo Ferrero, ya que Morelia se planto mejor y tomó las acciones ofensivas del encuentro. Pero sin mayor fortuna ni puntería.

Terminaron los 180 minutos reglamentarios, y Toluca y Morelia se jugaban todo en el Gol de Oro de los Tiempos Extras, en los cuales, de nueva cuenta, Morelia tenía las hostilidades y Toluca, aregalando todo el campo, esperaba un contraataque por parte de Cardozo, cosa que jamás ocurrió.

Finalizaron también los tiempos extras, el marcador estaba igualado a 3 tantos, se entraba a ronda de penales, donde los locales tirarian primero, despúes los de la capital michoacana.

Victor Ruíz anotó el primer penalty de la tarde, engañando por completo a Comizzo, pero en respuesta, Carlos Adrian Morales también batió la meta defendida por Hernan Cristante. El segundo tiro, lo incrustó al fondo de las redes el jugador chorizero Antonio Taboada y de igual forma, Jorge Fracisco Almirón, anotó para la causa michoacana; sin embargo, las cosas se pondrían bastante emocionantes y tensas, debido a que Comizzo atajo el tiro de Sinha, ahora, Javier Lozano tenía la oportunidad de darle ventaja a su equipo, pero también lo erró, atajandolo Cristante, para darle paso a Omar Blanco, quien anota con gran fuerza; por su parte, Monarcas Morelia igualaba el marcador vía Hugo Chavéz.
El último tiro para cada equipo lo decidía todo, Cardozo falló su penal, con una excelente atajada del arquero Comizzo. Y Alex lo tenía todo, el último tiro, solo debía anotarlo para ser campeones, pero lo manda desviado del marco defendido de Cristante, quien dicho sea de paso, se avento hacia el lado contrario.



Ahora en muerte subita, Manolo Martínez mandó gran fogonazo, imposible de atajar para Ángel David, y por otro lado, Miguel Hernández no permitiría que el trofeo se quedará en Toluca, y anotó su tiro, ante la mirada espectante e incredula de los espectadores, tanto purépechas como rojos.

Adrián García Arias, sin gran confianza, dispara, pero Comizzo, con más ganas que fuerza, atajo el penalty, y sólo esperaron a que Heriberto Ramón Morales batiera a Hernan, como a fin de cuentas sucedió, para coronarse como camnpeones del Torneo de Invierno 2000.


El festejo en el Estadio Nemesio Diez, en el trayecto de regreso a Morelia, y en ese instante por toda la afición Canaria, no se dejó esperar, cientos de gentes gritaron de júbilo al verse campeones, despúes de tantos años, por fin, tener un digno campeón.


Así estos jugadores, llenos de agallas y calidad, francamente poco valorados, pero con ganas de sobresalir, rompieron con lo especulado, y lograron coronarse como los Monarcas del Invierno '00.

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